trucos de cocina que solo conocen los profesionales

Sala las verduras un poco antes de cocinarlas







La sal hace que los vegetales pierdan agua más rápidamente lo que es bueno por 2 motivos.


El primero es porque hace que las verduras sean más crujientes y el segundo es porque acrecenta el sabor de las mismas considerablemente.



El bizcocho perfecto







Si quieres hacer un bizcocho y no estas siguiendo ninguna receta existe una regla no escrita que puede ser bastante útil. Se basa en que debemos añadir la misma cantidad en gramos de harina, huevos, mantequilla y azúcar.


De esta forma el bizcocho quedará siempre en el punto justo de sabor y frescura.



Añadir un poco de sal siempre que se cocine al horno







No es necesario añadir mucho, pero con media cucharada los sabores de los demás ingredientes y especias aumentan drásticamente.


Puedes usar el tipo de sal que prefieras, pero no te olvides de añadirla.



Cocina los huevos con un poco de agua







En vez de hacer los típicos huevos fritos prueba a hacerlos de este modo. Añade un poquito de aceite a la sartén (lo justo para que no se peguen) pon a freír los huevos y, en cuanto empiezan a blanquear, añade un poco de agua y tápalos.


Es una manera muy sabrosa y sana de cocinar este alimento.







Añade vinagre balsámico a los platos







No nos referimos tan solo a añadirlo a las ensaladas. Una cucharadita de vinagre balsámico en las fresas, verduras asadas o en los espaguetis, además de ser sabroso, es muy saludable.



Añade miga de pan a las hamburguesas







Si te gusta hacer tus propias hamburguesas añade un poco de pan rayado.


No solo facilita el amasado de la carne, sino que también le dará una textura más sabrosa.



Para que la carne quede mejor al cocinarla







Para que la carne quede más sabrosa y jugosa al cocinarla lo que debemos hacer es secarla con una servilleta para eliminar el exceso de agua. Luego la salamos un rato antes de cocinarla y en la sartén debemos poner poco aceite. Ponemos el fuego a nivel medio/alto y freímos los trozos de tal modo que no se amontonen entre ellos.


De esta forma quedará más crujiente por fuera y sabrosa por dentro.



Pon un poco de vodka en la masa de la tarta






El vodka es un 60% agua y un 40% etanol. Al cocinarlo la mayoría del alcohol se evaporará, por lo que no sabrá a vodka, pero le dejará el suficiente sabor para que se convierta en el mejor y más tierno bizcocho que hayas probado nunca.


Puedes experimentar con otros licores como el brandy o el ron.



Espesar cualquier receta de chile







Para que cualquier receta de frijoles y chile picante quede un poco más compacta solo hay que añadirle nachos (también llamados totopos) o harina de maíz mezclada con cerveza.


El plato ganará en textura y sabor.



Conseguir los filetes más jugosos







Para que el filete quede crujiente por fuera y tierno por dentro debemos seguir la siguiente técnica.


Salar el filete con sal kosher o de mar (Al ser más gorda el filete absorberá menos) luego lo enjuagamos, lo secamos bien y lo cocinamos con el fuego al máximo. Al eliminar la mayor parte de agua de la superficie de la carne se formará una deliciosa capa crujiente en el filete.







Un poco de bicarbonato en el té helado







Añadiendo un pizca de bicarbonato al té helado conseguiremos eliminar el amargor típico de esta bebida.







Bicarbonato de sodio para ablandar la carne







El bicarbonato de sodio aumenta la alcalinidad de la carne, lo que hace que sea más resistente a la rigidez a la hora de cocinarla. Pero hay que tener cuidado con las cantidades y tiempo que lo utilizamos ya que deja un sabor bastante fuerte.


Es recomendable no dejar el bicarbonato en al carne más de 15 minutos y, si aún así conserva el sabor, podemos contrarrestarlo con zumo de limón.



Mantener los cuchillos siempre afilados







Si queremos que nuestros cuchillos nos duren más tiempo afilados es recomendable que los almacenemos en tablas de madera y los limpiemos a mano.


Tampoco debemos dejarlos en remojo durante largos periodos de tiempo.



Atempera la vajilla para que la comida no se enfríe







¿Alguna vez has hecho comida para mucha gente y a la hora de servirla se ha quedado fría enseguida o se ha calentado cuando no debería?


La mejor forma para solucionar esto es atemperando las platos según la comida. Para comidas calientes lo mejor es meter los platos 5 minutos en el horno a 200º, para comidas frías 20 minutos en la nevera.